La capital de Portugal es pomposa y vibrante. Desde su rica historia hasta su ambiente contemporáneo. Sus calles empedradas serpentean entre edificios históricos, plazas llenas de vida y encantadores barrios.
Asegúrate de visitar la Torre de Belém y el Monasterio de los Jerónimos, así como el pintoresco barrio de Alfama. La ciudad ofrece una variada oferta cultural con museos, galerías de arte y una próspera escena gastronómica, donde se puede degustar delicias como el bacalao y los pasteles de nata. Con su clima templado, vistas panorámicas y una mezcla única de tradición y modernidad, Lisboa impresionará tus sentidos.