Los Cabos: donde el desierto besa al mar
En el extremo sur de la península de Baja California existe un lugar donde la tierra árida se encuentra con un océano de color profundo. Ese lugar es Los Cabos, un destino que sorprende, enamora y deja claro que la belleza puede ser salvaje, elegante y poderosa al mismo tiempo.
Dos mundos, un solo destino
Los Cabos une dos joyas muy diferentes:
- Cabo San Lucas, vibrante, festivo y lleno de energía.
- San José del Cabo, artístico, tranquilo y con ese encanto bohemio que invita a caminar lento.
Cada uno tiene su personalidad, pero juntos forman un destino que lo tiene todo.
El Arco: un monumento de la naturaleza
No se puede hablar de Los Cabos sin mencionar El Arco, esa formación rocosa icónica donde el Mar de Cortés se encuentra con el Pacífico. Verlo de cerca, en un paseo en barco, es sentir la fuerza del océano y la grandeza de la naturaleza en su máxima expresión. Y si la suerte acompaña… ¡puedes incluso ver leones marinos descansando!
Playas que invitan a desconectar
Aunque algunas playas no son aptas para nadar por la fuerza del mar, eso no les quita su encanto. Aun así, hay lugares perfectos para sumergirse, como:
- Playa del Amor
- Playa Chileno
- Playa Santa María
Todas con aguas claras, arena suave y ese ambiente de calma que se siente desde el primer paso.
Entre desierto, cactus y aventura
Los Cabos es un paraíso para quienes buscan experiencias diferentes:
- Recorridos en camello por el desierto
- Tours en cuatrimoto entre dunas
- Snorkel con peces multicolores
- Avistamiento de ballenas en invierno
- Kayak, paddle board y más…
Es un destino donde la adrenalina convive perfectamente con la tranquilidad.
Lujo frente al océano
Los Cabos es también sinónimo de elegancia: resorts que parecen palacios junto al mar, spas con vista al Pacífico, clubes de playa exclusivos y campos de golf de clase mundial. Aquí, el descanso se vive con estilo.
Gastronomía fresca y deliciosa
Desde mariscos recién salidos del mar hasta cocina fusión de chefs reconocidos, comer en Los Cabos es un placer. Tacos de pescado, ceviches, cortes de primera, margaritas inolvidables… todo acompañado del sonido de las olas.